Era un canto que no lograba identificar, un murmullo,
y no sabía desde dónde llegaba, daba la sensación que brotaba de las paredes.
Di vueltas por la casa y en todas las habitaciones vacías, lo escuchaba.
Me pregunté si me estaba volviendo loca.
Regresaron a mi memoria las palabras de mi
padre: “El pasado es como un pozo negro, si te acercas demasiado te puede
absorber”. Intenté salir y al hacerlo la casa comenzó a cobrar vida, las
paredes se cubrieron de cuadros, en la cocina, la mesa y las sillas, los
muebles y ese olor a vainilla de las
tortas de mi madre, todo regreso y fue nuevo.
En el parque que rodea la casa, los arbustos
habían cubierto parte del césped, la variedad de verde era un llamado a
tenderse sobre él y cerrar los ojos en un descanso eterno, sobre una de las
paredes la enredadera de un jazmín del país florecía en ramilletes blancos que perfumaban el aire, me sentí abrazada por esa naturaleza que había
crecido sin que nadie cuidara de ella.
¿Qué intentaba la casa?
¿Convencerme de que debía quedarme allí?
Abrí la puerta, salí y mientras cruzaba el
jardín, el murmullo creció, identifiqué las voces de mis hermanas cantando
aquella vieja canción de nuestra infancia. Era verdad, el pozo negro intentaba absorberme, cerré la puerta de
calle, le puse doble llave y desde la vereda vi que el cartel de venta de la
casa, relucía bajo el sol con reflejos que caían sobre él y se elevaban como
los rayos de un abanico.
Con lágrimas, dije adiós al ayer, mientras me
alejaba, las voces se fueron perdiendo en la tarde, no quise mirar atrás, ya
nada quedaba, solo una casa y sus fantasmas. Apuré el paso, el mundo real me
estaba esperando.
Cuento reeditado.
16 comentarios:
Es para que pensemos si el pasado nos interesa o preferimos seguir a por el futuro, pero los recuerdos nunca se borran de vez en cuando asoman. Que bien que lo reeditaras, no recuerdo haberlo leído. Un abrazuco
Es duro dejar una casa con sus recuerdos. Un beso
La casa... los fantasmas... los recuerdos...
Un abrazo y feliz día.
Has hecho muy bien de volver a reeditarlo, asi lo hemos vuelto a disfrutar.
Las casas tiene vida propia y sobre todo recuerdos de las familias que allí vivieron.
Un besote grande.
Creo que tomó la mejor decisión. El pasado puede ser una losa que nos impida vivir si le hacemos demasiado caso. Me gustó tu relato de hoy,tiene un ambiente de misterio y de algo oculto que atrae.
Un abrazo Mariarosa
Mejor alejarse de los fantasmas del pasado.
Un abrazo.
Linda historia María Rosa.
Encuentro mucho simbolismo en ella. No se si vale, pero para mi es un relato totalmente metafórico.
Y con tu excelente estilo narrativo hace que resulte muy interesante.
Abrazo va
La metáfora del "pozo negro que puede absorbernos" le viene muy bien al tiempo pasado...Es bueno recordarlo y valorarlo, pero no profundizar demasiado en él, porque la mente se engancha a veces y es difícil avanzar hacia adelante. Muy buen relato, que nos muestra la fortaleza, claridad y decisión de la protagonista, María Rosa.
Mi abrazo entrañable y agradecido por tus generosos posts.
Las casas se quedan con los recuerdos. Genial cuento. Te mando un beso.
Me gusta el cuento y me gustan las casas antiguas tienen nostalgia y magia por el pasado, hace unos dias estuve en una situacion parecida a la de la protagonista, poniendo en venta una casa del ayer.
Un besote.
Es una extraña nostalgia que, se manifiesta en el vivo de voces que hicieron parte de los familiares un abrazo. Carlos
Hay decisiones que tomar sin dudas y esas a veces cuestan, más.nuestras raíces nunca se olvidan.
Abrazo
Un excelente relato amiga. Real y delicado.
Abrazo Mariarosa.
He pasado por situaciones y sentimientos similares.
Un cuento brillante y precioso...
Admirada, te he estado esperando...
Un abrazo, amable escritora.
~~~~
Que triste es dejar atrás los recuerdos. Hizo bien en quedarse en el presente que la esperaba. Estupendo relato.
Buen septiembre Mariarosa.
Un abrazo
Hay que tener fuerza de voluntad para dejar atrás el pasado y vivir el presente a plenitud.
Fuerte abrazo Mariarosa
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