viernes

2º capitulo La ista de los tigres.


La lancha era rápida, cortaba en dos el río generando una espuma que lograba que el alemán no pudiera quitar sus ojos de ella.
Desembarcaron en un muelle  deteriorado por el abandono y los años. Durante la primera hora de camino sólo encontraron Sauces,  Espinillos y Lianas y algún conejo que les llamó la atención por su gran tamaño.  Más adelante comenzaron a aparecer juncos y helechos gigantes y un verde profundo que daba a las especies la impresión de haber salido de la sinfonía verde  de Monet. 
Leandro  fotografiaba y anotaba en un cuaderno todo lo que llamaba su atención.  Al medio día se sentaron a comer, estaban cansados, caminar se hacía difícil sobre un piso  acolchonado de hojas que se hundía al andar. Continuaron la marcha, ningún animal salvaje les había salido al paso, los anuncios de don Cedrón no se concretaron.
A medida que avanzaban la selva se cerraba  entre raíces y lianas.  Algunos gatos salvajes cruzaron ante ellos, tan asustados como los exploradores. La cámara del alemán los robó en el aire. Árboles altos poblados de flores blancas y muy perfumadas surgieron de pronto, se detuvieron,  el alemán  guardaba muestras  e imágenes.
El extraño aroma que llenaba el ambiente; dulce y con resabios de limón los envolvió. A poco de andar, un sopor fue menguando sus fuerzas. Por primera vez Leandro se sintió inseguro, no era una sensación placentera, producía somnolencia,  Chúcaro se dejó caer sobre unas raíces y se acomodó con su mochila para dormir. De nada sirvieron los gritos del alemán tratando de mantenerlo despierto, al fin se cansó de gritar y se sentó, en pocos minutos se dejó ganar por el cansancio.

Frente a él, fue cayendo una lluvia blanca  de flores, formando  un camino que  al igual que una alfombra invitaba a seguirla. Dejó atrás a Chúcaro  y avanzó, el perfume lo mareaba. De pronto el  sendero se fue cerrando, la selva  ponía un freno a su asombró. Lapachos, urunday y  helechos diferentes a los que observó al entrar, cerraban su paso, eran enormes, su copa se perdía en la altura ocultando el cielo,  el piso  se hundía  en la humedad de hojas amasadas por  los años y  hacía que su pelo cayera sobre su frente,  lacio y mojado. 
Algo se movió a su costado, se detuvo, vio a lo lejos deslizarse un árbol, creyó que el aroma de las flores lo había  drogado y estaba viendo visiones.




El lunes va el final....

16 comentarios:

Mª Jesús Muñoz dijo...

Muy bien narrado, Maria Rosa, podemos ver las imágenes con gran claridad y hasta casi oler ese aroma envolvente de las flores...Mi felicitación y mi abrazo inmenso por tu buen hacer...Esperamos la tercera parte..
Feliz fin de semana, amiga.
M.Jesús

Sneyder C. dijo...

Hola María Rosa. Hoy he leído la primera y segunda parte y ante mis ojos he visto la penetrante selva con sus helechos gigantes y esas flores blancas que despiden un intenso aroma que nubla la razón… Ahora a esperar la tercera entrega.
Me ha atrapado tu relato, felicitaciones.
Feliz fin de semana.

Un inmenso abrazo

Tot Barcelona dijo...

Ahora a esperar la tercera parte.
salut

omar enletrasarte dijo...

hasta se respira ese dulce perfume
muy bueno!
saludos

María Socorro Luis dijo...

Ya la primera parte era sugerente y prometedora. Ahora nos dejas en la parte mas inquietante y misteriosa. Maravillosamente contado nos metes de lleno en la aventura y en la zozobra...
Esperemos...

Y entre tanto un abrazo.

Mirella S. dijo...

Me sentí atrapada en esa selva a medida que la describías...
Esperaremos hasta el lunes por el desenlace.
Buen fin de semana, Mariarosa.

Anónimo dijo...

Hacia un tiempo que te veía, debido a las actualizaciones y hoy me encuentro estos dos capítulos ue según leo también me voy adentrando en camino, ahora llego al fin y me qudo en lo mejor, ya estoy deseando leer el siguiente aunque sea con retraso.
Un abrazo.
Ambar

PEPE LASALA dijo...

He leído las dos, y me quedo con ganas, jejeje. A ver la tercera. Un fuerte abrazo y feliz fin de semana amiga.

Marinela dijo...

Maria Rosa, ¿Que final sorprendente nos tienes preparado? ¡Estoy impaciente por leer el final!

Salud y buen fin de semana.

Pluma Roja dijo...

Pensé en el canto de las sirenas.


Continuaremos.

Rosi dijo...

Estoy deseando ya que llegue el lunes y con el la tercera parte.
Es una narración preciosa.
Un fuerte y cariñoso abrazo.
Rosi

Kasioles dijo...

Quiero más, más.
Por un momento, me he sentido entre árboles y helechos gigantes, hasta he notado ese perfume dulzón de las flores, has sabido drogarme con tu foema de escribir, no tardes en volver, avísame cuando lo hagas, no puedo perdérmelo.
Yo también he publicado pero no se me ha actualizado, ignoro la causa.
Cariños y abrazos.
Kasioles

TIGUAZ dijo...

Me da la impresión de que todos estamos deseando que sea lunes. Mi aplauso con todo el cariño.

lichazul dijo...

muy bien presentado el escenario donde se desarrolla la acción de los pérsonajes

lujo de detalles
besitos y buen fin de semana

Anónimo dijo...

SE VE BUENA, ESPERARÉ.
BESOS

Unknown dijo...

ESPECTACULAR. Una descripción MAGISTRAL.
¡Te felicito M. Rosa.
¡QUIERO EL FINAL !!!!!!!!!
Muscksssssss
¡FELIZ DOMINGO !! :)

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